UNA RESPUESTA AL NUEVO ATEÍSMO
¿Ateísmo brillante o fundamentalista?
Este artículo es la parte 1 de 3 respuestas al nuevo ateísmo, especialmente al documental The Four Horsemen [i] (Los cuatro jinetes), un diálogo entre Richard Dawkins, Daniel Dennett, Cristopher Hitchens y Sam Harris. Estos 4 jinetes del ateísmo son los autores antirreligiosos más populares del siglo XXI. El término «nuevo» destaca una mayor beligerancia contra las religiones respecto a ateos anteriores.
Parte II: El supuesto peligro de la religión moderada y el mal cometido por no religiosos. Parte III: Científico vs. creyente y Fe atea.
Creemos en Jesús, no en lo que los cuatro jinetes dicen que creemos
Las generalizaciones nunca son justas. Y menos cuando como cristiano me apuntan criticando creencias distintas a las mías o como si todas las religiones fueran lo mismo ¿Qué sentido hay en que me acusen con aquello que también critico? Si existen 10.000 religiones, los cristianos somos ateos de 9.999 de ellas, sobre todo de la cristiana cuando no refleja al Jesús de los evangelios. Son principios de sentido común que no suelen asumir los cuatro jinetes del ateísmo. Esto explica, por ejemplo, por qué otros ateos los tildan de fundamentalistas (siempre usaremos el término “fundamentalista” en su acepción negativa).
Jinetes fundamentalistas… según otros ateos
Numerosos intelectuales ateos de gran influencia han criticado este popular ateísmo autodenominado brillante. El darwinista Michael Ruse nota que “ninguno [de estos ateos] ha estudiado la fe cristiana seriamente para poder opinar sobre sus ideas. Resulta burdo y llanamente inmoral aseverar que el cristianismo es tan sólo una fuerza del mal [1]”. Del libro de Dawkins, El Espejismo de Dios, Ruse dice que le “hace sentir vergüenza de ser ateo [2]”. El filósofo Thomas Nagel califica los argumentos de Dawkins como “especialmente débiles [3]. Peter Higgs, Nobel de física 2013 y descubridor del famoso bosón que lleva su nombre, califica a Dawkins como “fundamentalista en el extremo opuesto” [4]«.
El creyente común pone el grito en el cielo ante los abusos en el nombre de Dios. Pero ni nosotros ni los cuatro jinetes hemos inventado nada nuevo. Amos, Miqueas, Jeremías, Ezequiel, Isaías… fueron profetas de La Biblia que arriesgaron sus vidas denunciando el abuso religioso milenios antes. También fueron religiosos fundamentalistas del Dios bíblico (los fariseos) quienes llevaron a Jesús a la cruz. Son ejemplos del abuso en el nombre de Dios como acto blasfemo anti-cristiano [5]. Así que la denuncia de la opresión religiosa no es un argumento contra el cristianismo sino cristianismo en estado puro, algo sencillo de entender para quien quiera entenderlo.
Al comienzo del coloquio Hitchens parece admitir que es injusto mencionar a frikis o asesinos como ejemplos del cristianismo objetivo. Quiere entenderlo… ¡Pero de inmediato cita a un clérigo que atribuye a los homosexuales el castigo de un terremoto! El ejemplo que pone Hitchens es un esperpento que no representa al cristianismo. Jesús enseñó que las cosas no suceden así y que este tipo de males no deben relacionarse con supuestos pecados tal y como algunos hacían por entonces (Juan 9, 1-3). Cristo desafió el mundo antiguo rompiendo con esta cosmovisión y adelantándose a Hitchens en su denuncia, quien de nuevo hace decir al cristianismo justo lo contrario de lo que realmente dice.
La estrategia dialéctica de los cuatro jinetes es tan simple como antigua y falaz: Mostrar lo patológico como normal, como si el esperpento fuese el cristianismo de Jesús en el que creemos.
Hacen y critican teología sin saber teología
La falta de nociones teológicas es una característica clave del nuevo ateísmo. Terry Eagleton, conocido crítico literario y catedrático de teoría cultural, dice: “Imagine a alguien pontificando sobre biología sin haber leído nada más que “El libro de los pájaros británicos”, y tendrá una idea aproximada de lo que se siente leer lo que escribe Richard Dawkins sobre teología[6]”. Los cuatro jinetes desprecian la teología a la par que sientan cátedra con interpretaciones sensacionalistas que no tienen en cuenta el contexto histórico–cultural y que cualquier exégeta descartaría al instante.
Un ejemplo de esta actitud es cuando Dawkins dice que “Ama a tu prójimo no significa lo que ahora pensamos que significa. Solo significa “Ama a otro judío [7]”. El Dr. John Lennox observa cómo Dawkins ”se basa en Levítico 19, 18 “No te vengarás, ni guardarás rencor a los hijos de tu pueblo, sino que amarás a tu prójimo como a ti mismo”. Pero Dawkins ni siquiera se molestó en leer el resto de Levítico 19 […] Amar al prójimo no significaba limitarse a su propio grupo: “Cuando un extranjero resida con vosotros […] lo amarás como a ti mismo, porque extranjero fuisteis vosotros en Egipto (Lv 19: 33-34) [8]”. Como vemos, Dawkins no solo mutila un pasaje para hacerle decir lo contrario sino que omite que cuando Jesús dijo “Ama a tu prójimo como a ti mismo” le preguntan: “¿Quién es mi prójimo?” él responde con la parábola del buen samaritano (Lc. 10:25-37), el pueblo rival y odiado por los judíos, rompiendo así toda frontera étnica. Luego Pablo enseñó que “en Cristo ya no hay judío ni griego” (Ga. 3, 28) y Pedro tuvo un sueño que acabaría con cualquier atisbo de localismo étnico en el cristianismo (Hech. 10:1-48).
Así que sin ni siquiera entrar en ninguna teología profunda vemos que la aversión religiosa de Dawkins le impide ver aquello que es nítido y evidente ¿Nos fiaremos entonces de él en otros asuntos teológicos más complejos? No parece que Dawkins sea la fuente más rigurosa para analizar La Biblia.
El teólogo John Haught afirma que la comprensión de la fe de estos ateos “permanece sistemáticamente en el mismo plano indocto que la religiosidad irreflexiva, supersticiosa y “literalista” de aquellos a quienes critican [9]”. Francis Collins, uno de los grandes científicos del siglo XXI convertido al cristianismo, observó en estos ateos “el viejo truco del arte del debate y la retórica; se tergiversa lo que diga el contrario para seguidamente demoler sistemáticamente sus “argumentos” [10]”. No cabe duda de que si los cuatro jinetes fueran más rigurosos con aquello que critican, perderían interés para el gran público sin formación teológica al que se dirigen.
Alister McGrath, triple doctorado por la Universidad de Oxford, observa que Dawkins “parece pensar que una ignorancia de las ideas cristianas es una señal de virtud intelectual. […] Para mí la virtud intelectual está en estudiar, entender y apreciar una visión del mundo, aun cuando crea que está equivocada. Yo era ateo cuando era joven, y rechacé el cristianismo por razones muy similares a las de Dawkins. Ahora veo que simplemente no entendía el cristianismo. Pero nunca ridiculizaría el ateísmo [11]”.
Un ejemplo recurrente del simplismo de los cuatro jinetes consiste en exponer la creación del Universo de Génesis 1 como si su lectura literal fuera la interpretación obligatoria. Pero nunca los veremos analizando el relato desde su contexto histórico-cultural [12], que es lo que debe hacerse y lo que dicta el sentido común… si es que nos interesa ser justos y conocer la verdad, claro.
Durante el documental los cuatro jinetes generalizan acusando a los jerarcas religiosos de timadores y corruptos, lo cual es un juicio contrario a los hechos. En mi relación con jerarcas cristianos durante años he visto fundamentalmente a personas que aman a los demás sacrificando su prestigio y dinero. Hay timadores, sí, pero pocos. Y en todo caso serían actitudes anti-cristianas por definición. El cuadro pintado por los cuatro jinetes existe y es denunciable, pero no es el general ni -por supuesto- el que define qué es el cristianismo.
Resumen: Los ejemplos negativos ofrecidos por los nuevos ateos evidencian que todo puede ser objeto de distorsión e instrumentalización para el abuso. Y sobre todo se parte de aquello que es bueno para abusar. Y esto le ocurre al cristianismo. Pero los cuatro jinetes desconocen realmente el cristianismo y no desean su análisis justo y ponderado (¡Así lo admite Daniel Dennett en el documental! 1 h. 44´). El propósito de los cuatro jinetes es atacarlo sin importar cuan sesgados o irracionales sean los métodos. Y esto es algo que parece entusiasmar a muchas personas que se auto consideran libres pensadores. Nada nuevo en la era de la posverdad.
Por Delirante.org
[i] The Four Horsemen, Coloquio organizado por RDFRS, grabado por Josh Timonen. 30/04/2007.Con subtítulos en español en: https://www.youtube.com/watch?v=tS_MT79m4Vw
[1] https://es.wikipedia.org/wiki/Michael_Ruse
[2] De la portada de Alister McGrath y Joanna McGrath. The Dawkins Delusion?, Dwners Grove, OL: InterVarsity Press, 2007
[3] Thomas Nagel, crítica de El Espejismo de Dios, The Fear of Religion, The New Republic (23 de octubre de 2006); p. 29.
[4] El Mundo. 27/12/2012. Peter Higgs: ‘No soy creyente, pero la ciencia y la religión pueden ser compatibles”. Actualizado 03/01/2013
[5] Delirante.org, El Cristianismo ¿imposición y barbarie?
[6] Terry Eagleton, London Review of Books Vol. 28, No. 20, 19 /10/2006, p. 32
[7] Richard Dawkins, El espejismo de Dios, Espasa, 2007, p. 272
[8] John Lennox ,Disparando contra Dios, Andamio, 2016, p. 182
[9] John F. Haught, Dios y el nuevo ateísmo: Una respuesta crítica a Dawkins, Harris y Hitchens, Sal Terrae, 2012, pp. 14-15
[10] Francis Collins, Fe, ciencia y ateísmo, Andamio, 2015, p. 39
[11] El Pais, Alister McGrath, “El nuevo ateísmo está cayendo en desgracia”, 18/03/2016
[12] Una sencilla interpretación contextualizada de Génesis 1 puede leerse en http://delirante.org/?p=181
>